Al término de las movilizaciones acontecidas el pasado mes de junio en la ciudad de Huancavelica motivadas por la creación de la universidad de Tayacaja, vemos que las consecuencias van más allá de la lamentable pérdida de tres vidas valiosas de jóvenes huancavelicanos y de las cuantiosas pérdidas materiales. Los acontecimientos muestran debilidades en el sistema y en la gestión de conflictos a nivel regional y nacional, que además se mezclan con intereses personales específicos.
En primer lugar, debemos recordar que los congresistas por Huancavelica, José Saldaña Tovar y Miró Ruiz Delgado, electos por el partido de Ollanta y en funciones hasta el 28 de julio del presente año, crearon el proyecto de ley para la creación de la citada universidad. La propuesta se elaboró sin considerar la opinión del Gobierno Regional de Huancavelica o de la Asamblea Nacional de Rectores. Así, los legisladores buscaron cumplir con promesas electorales realizadas en la campaña electoral de 2006, a pocos meses para la culminación de su periodo legislativo.
La Comisión de Educación del Congreso crea universidades por todo el territorio nacional. Mientras tanto, la calidad de los centros de estudio y de los profesionales que egresan de dichas universidades de «escaso prestigio», no está siendo tomada en cuenta. Cada año ingresan oleadas de profesionales al mercado laboral que no consiguen el empleo deseado, o terminan subempleados en actividades ajenas a su profesión. Como sabemos, en nuestro país la mayoría de los profesionales de éxito egresan de universidades con nombre propio. Entonces ¿se trata de brindar a los jóvenes de Huancavelica la oportunidad legítima de estudiar en su propia localidad una carrera universitaria?, ¿o se buscó simplemente aprovechar una circunstancia para cumplir una promesa que no tenía sustento ni análisis previo? Así la sociedad civil y la opinión pública deberían estar atentas durante las campañas para analizar las ofertas electorales y denunciar aquellas que no estén debidamente discutidas y de esa forma no generar falsas expectativas en la población. En esta oportunidad, esta situación surgió por la propuesta de dos congresistas que están de salida, sin embargo, este panorama se repite en todos los niveles de gobierno.
Las manifestaciones cesaron porque el gobierno nacional decidió crear una nueva partida para la naciente universidad de Tayacaja, sin afectar el presupuesto de la Universidad de Huancavelica. Sin embargo, no queda claro cómo quedarán los fondos provenientes del canon que en todo caso tendrán que ser compartidos desde ahora.
Estos hechos exponen, una vez más, la absoluta debilidad en el manejo de conflictos por parte de las autoridades competentes. La policía perdió rápidamente el control lo que provocó tres fallecidos, y múltiples daños materiales, sobre los cuales nadie asume responsabilidad. Cuando en un conflicto se pierden vidas humanas a causa de impacto de balas o de perdigones es que alguien esta haciendo mal las cosas. ¿Será suficiente un año de preparación en la Escuela de Suboficiales de Huancavelica –y en algunos casos menos– para darle a un joven policía un arma y encargarle el manejo de la turba en las calles? La rectora de la Universidad de Huancavelica renunció a su cargo, pero el jefe policial de Huancavelica no se responsabiliza por nada y sigue en el cargo.
En este escenario las cosas continúan agitadas en la región Huancavelica. El descontento popular por el gobierno regional que cumplió seis meses en la gestión es mayoritario y el presidente Maciste Diaz, tiene que dar cuenta de acciones que, al parecer, él no ha provocado; aunque es preciso decir que en el mes de julio ha culminado –con retraso– el proceso de Presupuesto Participativo. No obstante, lo más prudente es esperar la ascensión del nuevo gobierno nacional el 28 de julio para corregir aspectos críticos del marco normativo que, como en el caso de la creación de universidades y de la capacitación de policías, necesitan cambios importantes.
desco Opina - Regional / 15 de julio de 2011Programa Sierra Centro
Descargar aquí
No hay comentarios:
Publicar un comentario